Book Appointment Now

Cuando sanar duele más que quedarte igual
A veces creemos que sanar será suave, inmediato o incluso bonito. Pero sanar también incomoda.
Es mirar tu sombra, soltar vínculos que amas, romper patrones que llevas años repitiendo.
Aquí te acompaño a entender por qué ese dolor temporal es parte del proceso y cómo sostenerte mientras te transformas.
La incomodidad es señal de que estás creciendo. No retrocedas.